Esta intervención de alta complejidad se ha llevado a cabo en el Hospital Sant Joan de Déu y la paciente está en remisión completa. En algunos casos de neuroblastoma, el tumor no responde al tratamiento con fármacos y solo la cirugía es curativa.
La familia de Barbara, una paciente de origen polonés de 3 años, se alarmó cuando la pequeña empezó a quejarse de dolores intensos en la barriga. Todo empezó en Octubre de 2021, una noche Barbara durmió muy mal quejándose de dolor de barriga. Los padres vieron que la tenía bastante hinchada y al día siguiente su padre, médico anestesista pediátrico de un hospital universitario en Polonia, examinó a la pequeña y rápidamente sospechó de la presencia de un tumor en su abdomen.
Tras las pruebas diagnósticas que le hicieron en su país, se confirmó que la pequeña tenía un neuroblastoma de grandes dimensiones y la empezaron a tratar con sesiones de quimioterapia. Sin embargo, el tratamiento no funcionaba y el tamaño del tumor no se reducía. Le hicieron una intervención en Polonia y, en el transcurso de la cirugía, los médicos consideraron imposible la resección, concluyeron que tenía metástasis y Barbara empezó con otra ronda de quimioterapia de altas dosis.
Los padres de otra niña que había sido tratada también de neuroblastoma en el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, les hablaron de la atención recibida en el centro. Curiosamente, el padre de Barbara había estudiado en Sant Joan de Déu, y al oír el nombre del Hospital, rápidamente lo comprendió.
Contactaron con el Dr. Jaume Mora, Director científico del Área de Oncología y Hematología del Hospital, quién insistió mucho para que vinieran a Barcelona, porque confiaba en las posibilidades de extirpar la totalidad del tumor gracias a la alta especialización de los oncólogos y cirujanos del centro. Así que la familia decidió viajar a Barcelona.
La niña llegó muy débil al Hospital. Tras examinarla y hacerle todas las pruebas necesarias en el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, el Dr. Mora concluyó que la pequeña no tenía metástasis. Se trataba de un neuroblastoma abdominal, pélvico, una gran masa que rodeaba y desplazaba grandes vasos y uréteres que probablemente había sido confundida con una metástasis en el centro hospitalario de origen.
En algunos casos de neuroblastoma como el de Bárbara, el tumor no responde al tratamiento con fármacos y solo la cirugía es curativa. En este escenario, aplicar quimioterapia no solo no es útil sino que puede resultar perjudicial por la toxicidad que conlleva.
En febrero de 2022 el Dr. Lucas Krauel, la Dra. Rosalía Carrasco y su equipo de cirugía pediátrica operaron a Bárbara. Antes de la cirugía, se llevó a cabo una planificación e impresión del tumor en 3D, para planificar la operación, que preveían compleja. La intervención duró siete horas y el equipo logró resecar prácticamente todo el tumor.
Según el Dr. Krauel, "la biologia del tumor resecado es considerada como 'favorable'. Esto quiere decir que, a pesar de quedar un resto tumoral en la zona que entra dentro de la médula espinal, se espera que evolucione hacia la maduración y que, por lo tanto, no crezca ni suponga un problema en el futuro (la niña crece y el tumor queda igual)".
Un mes después de la intervención, cuyo postoperatorio transcurrió sin complicaciones, Barbara ya pudo volver a su escuela en Polonia y hacer vida normal, sin tener que hacer más tratamientos, tan sólo los controles periódicos habituales para asegurar que todo sigue bien.
“Ahora la niña está perfectamente bien, corre, habla, tiene ganas de jugar… Como cualquier otra niña de su edad. Todo esto nos ha unido, lloramos de emoción” dice Anna, la madre de Barbara. “En el Hospital vivimos la mejor experiencia. Aquí, lo primero es el paciente, después su hermano, que fue muy importante para Barbara porque jugaba mucho con ella, pues no la veía como una niña enferma, sino como su hermana. Hay mucho amor entre ellos y esto fue muy importante para ella. Y en tercer lugar los padres, porque en todo momento podíamos estar con Barbara”, concluye Anna.
El padre de Barbara, Szymon, comenta que "aquí no me he sentido como en un hospital, se nota que los niños y sus familias son lo más importante. Estamos muy agradecidos con el trato recibido por parte del Dr.Mora y Dr.Krauel, nos han ayudado mucho, sabíamos y sentíamos que dejábamos a Barbara en manos de los mejores. Ahora estamos recomendando a personas con la misma situación que vengan al Hospital Sant Joan de Déu.