Sant Joan de Déu colabora con Salut para dotar a Cataluña del primer acelerador de protones público

El Sistema de Salud de Cataluña inicia los trabajos para dotarse del primer acelerador de protones público para el tratamiento de enfermerdades de oncología pediátrica. El objetivo es disponer de un centro de protones dentro de la red oncológica pública catalana que permita una mayor accesibilidad a todos los pacientes que necesiten este tratamiento, tanto de Cataluña como otras comunidades autónomas. Por este motivo, Salut ha firmado un protocolo de colaboración para el desarrollo del proyecto junto con el Hospital Universitari Vall d’Hebron, el Hospital de Sant Joan de Déu Barcelona, el Institut Català d'Oncologia (ICO), el Hospital Clínic y el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau.

Alrededor de 200 pacientes se podrían llegar a beneficiar de este tratamiento el primer año y más de 250 cuando esté en pleno rendimiento, la mayoría niños. Según el doctor Manel del Castillo, director gerente del Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, "este proyecto es una muy buena noticia que hará que Cataluña se consolide como una área de referencia en oncología infantil en el sur de Europa".

Tal como explica el doctor Adrià Comella, director del Servei Català de la Salut, “se trata de una oportunidad para los pacientes y sus familias, puesto que podrán disponer del tratamiento sin necesidad de desplazarse de su ámbito familiar”. El coste de este desplazamiento, tratamiento e ingreso excepcional supone una media de unos 40 mil euros por caso.

La protonterapia es una forma de radioterapia que actualmente representa una importante herramienta terapéutica en el tratamiento multidisciplinar en oncología pediátrica. El principal beneficio en niños es la reducción en la toxicidad y la aparición de segundas neoplasias, producidas por los tratamientos de radioterapia convencionales. Los resultados clínicos de la irradiación de tumores infantiles con esta terapia son prometedores tanto por lo que respecta a la probabilidad de curación, como a la mejora en la calidad de vida de los niños y niñas.

De manera comparativa con otras terapias, se demuestra que esta es menos agresiva y ayuda al mantenimiento de funciones tan importantes como la inteligencia, la visión y la audición. Esto es debido a la capacidad de los protones de ser más precisos en la irradiación del tumor y, por lo tanto, disminuir la irradiación en tejidos sanos pero próximos al tumor. Por estos motivos, las principales sociedades científicas y muchas organizaciones sanitarias consideran que la curación con protones tiene una indicación fundamental en el tratamiento de los tumores infantiles.