"Ejercer como pediatra cooperante es una oportunidad increíble para el crecimiento personal y profesional de un residente”
Dos de los participantes del programa de cooperación para residentes de Sant Joan de Déu explican su experiencia en Sierra Leona
Raquel y Gerard habían coincidido como residentes en el Hospital, pero cuando viajaron a Sierra Leona, todavía no habían trabajado juntos como pediatras. En la actualidad, ambos confiesan que la experiencia los ha unido como compañeros y amigos pero sobre todo, resaltan el profundo aprendizaje de haber estado dos meses ejerciendo la pediatría en el continente africano. “Estábamos entusiasmados”, explica Raquel García, R4 del MIR de Pediatría, “pero, además de las ganas, es necesario tener un asesoramiento previo a la cooperación, y el curso que se propone en el Hospital para formar a futuros residentes cooperantes nos parece de gran utilidad”.
Ambos residentes valoran en positivo tanto la estancia como el plan formativo del programa y, especialmente, el acompañamiento de los primeros días en el hospital de Saint John of God. “Es fundamental que te introduzcan porque, hasta que no llegas, no eres consciente del reto que tienes delante”, relata Gerard Martínez, R4 del MIR de Pediatría.
Una de las cuestiones que más impactaron a ambos fue la alta tasa de mortalidad de la zona: “Es muy difícil de digerir porque no estamos nada acostumbrados y nunca te terminas de acostumbrar, en realidad, porque hay casos que aquí se hubiesen podido salvar”, recuerda con semblante serio, Gerard, que añade que la rotación en Cuidados Paliativos y Paciente Crónico Complejo les había dotado de algunas herramientas pare enfrentarse a situaciones de este tipo.
Trabajar con los recursos disponibles: un reto de la rotación
La otra gran dificultad con la que trabajar fueron los recursos. “Que el hospital no tenga electricidad por la noche, la necesidad de dosificar mucho los fármacos o tener una habitación de críticos sin una monitorización como la que tenemos aquí, obliga a trabajar diferente y agudizar el ingenio”, precisa Raquel. “Para el diagnóstico, contábamos con un ecógrafo que usábamos siempre que teníamos dudas y eso nos ayudó mucho. Aun así, nos sentíamos muy bien acompañados y teníamos bastante claro hasta donde podíamos llegar con los recursos disponibles en la zona rural donde estábamos”. Ambos residentes resaltan la necesidad de estudiar antes de su partida y también allí para poder dar respuesta a patologías que no se ven tan frecuentemente aquí. “Las interconsultas puntuales que hacíamos con los especialistas de cada área eran muy útiles siempre en caso de duda”, concluye.
Acompañamiento de profesionales del hospital Saint John of God
Respecto a la relación con los profesionales locales el balance es muy positivo. “En ocasiones puede haber cierto recelo hacia los cooperantes, ya que algunas personas al llegar de Europa u otros países intentan imponer su manera de hacer, pero en este caso nos acogieron rápidamente, nos hemos sentido muy acompañados y han sido un gran apoyo tanto profesional como en nuestro tiempo libre, en el que hemos vivido los tiempos de ocio de forma comunitaria”, explica Gerard. “Ellas y ellos conocen el terreno mejor que nadie y además son receptivos a todo lo que les explicamos cuando llegamos de Barcelona”, añade.
Tanto Raquel como Gerard consideran que la continuidad del programa sería de gran utilidad porque se han impulsado mejoras que podrían mantenerse con la llegada de nuevas y nuevos residentes de medicina y enfermería. "Esto permitiría también saber si realmente nuestra estancia supone mejoras en la salud de la comunidad y recoger datos”, explica Raquel, cuya percepción es en positivo. Por su parte, Gerard concluye que “hay algunos procedimientos rutinarios aquí que allí pueden cambiar una vida. Aquí se trabaja con un equipo grande y el resultado de los tratamientos y el cuidado se diluye. Allí, en cambio, ves la evolución del paciente y recuerdas por qué te dedicas a esto. Ejercer como pediatra cooperante es una oportunidad increíble para el crecimiento personal y profesional de un residente”.